El personaje de ella le da un nombre alternativo al filme, Eliza Graves, además la producción es conocida también por la denominación del asilo para pacientes mentales Stonehearst. En español el nombre, es como es usual, muy malo, "Asylum: el experimento" una mezcla innecesaria de inglés y español que tampoco es fiel al argumento, pues acá lo importante no es ningún experimento.

La acción transcurre entre las vísperas de Navidad de 1899 y la llegada del año 1900.
Eliza Graves es una joven educada de clase alta que está diagnosticada como enferma mental y que es excepcionalmente bella.

Su personaje va a deslumbrar a un joven médico de Oxford que llega al aislado manicomio para empezar a ejercer su profesión.

Esta película es de suspenso, casi lindando con el terror. Su gancho es el argumento y los giros en la trama que sorprenden, el asilo aislado y en medio del invierno helado es un mundo en sí mismo, y uno peligroso.
El joven médico idealista lo va a ir descubriendo solo.
Me agradó que oprime al espectador y lo hace sufrir más por lo que plantea, que por lo que muestra.
Me resultaron convincentes los actores secundarios como Ben Kingsley y Michael Caine que hacen personajes creíbles.

Si tuviera que criticarle algo sería la representación de la locura como algo mucho menos crudo de lo que es en realidad, es una exhibición demasiado edulcorada de la misma. En algún momento hasta sentí que el clima que crea esta simplificación degrada el filme, pues lo percibí casi como una parodia de la insanía que atenta contra el propio clima de suspenso y tensión que es la clave de la historia.
La ambientación sí me pareció cuidada y que ayuda al relato, por un lado un mundo lujoso de ciencia, bibliotecas y alfombras y paredes cubiertas de maderas y cuadros, en una era donde la ciencia y la educación cambian el mundo, y por el otro la catacumbas sombrías y mugrientas de hace siglos.

Luego vi que fue filmada en Bulgaria, rarísimo.
El asilo que da nombre al filme era un entorno para hacer una obra de terror más intenso en mi parecer, esta que ser ve sí atrapa y tiene suspenso, no aburre, pero creo que había lugar para algo más oscuro y extremo. Con un poco más de sordidez hubiese sido algo memorable, pues el ambiente y la base argumental eran excelentes para ello.
Percibí que la insanía es representada en algunos momentos como un grotesco, de forma un tanto caricaturesca y que eso quita tensión.

Por como está contada la historia el espectador queda atrapado por la misma, yo me vi sin chances de anticipar nada del argumento.
Eso sí, fui lo suficientemente inteligente para no ver la cola, pues la misma es un atentado contra la película, que adelanta mucho más de lo que debe y destroza el suspenso. ¡Es increíble que gasten buen dinero en ambientación, vestuario, vayan a filmar a Bulgaria y luego agredan su obra de esta manera!
La escena de Italia en el epílogo para mí, sobra.
Me resultó disfrutable sin ser algo excepcional y creo que merece 6,5 yenes.