Estoy empezando a pensar que algunas profesiones deben afectar la sensibilidad de quien las practica, y tornarlo un poco impermeable.
A ver si me explico, un pastel no será lo mismo para un pastelero que los hace a diario, que para una persona golosa que lo disfruta cada tanto; no se debe asquear de la misma manera un cirujano que una señora fina de barrio norte.
En La Nación entrevistaron a un muy veterano médico forense argentino y en esa nota me pareció ver algo por el estilo.
El experto doctor y su alumno me dieron la impresión de tener "otro sentido del humor", otro nivel de tolerancia a la crueldad y mutilación, otro grado de visión de la vida y la realidad que muy pocos tienen.
Menciona crímenes muy conocidos de argentina y me parece que merece una lectura.
La nota es Los secretos del samurái que trabajaba en la morgue.
Impresionables abstenerse. Quienes hayan visto todo un programa de Chiche Gelblung también ... (ya van a haber visto todo ....

Al terminar de leer la nota, un tanto harto de tanta silicona parlante en la tv, condutor/fiolo no pude dejar de pensar "que interesante sería que alguien entreviste a este tipo un buen rato".