Lecturas interesantes en la web [5]

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Yenki
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Re: Lecturas interesantes en la web [5]

Mensaje por Yenki » Mié Jul 12, 2023 7:30 pm

Favaloro el último patriota
El médico cirujano cardiovascular, hoy cumpliría 100 años, nació en La Plata, su padre era carpintero y su madre modista, y ahí se recibió de médico. Es hijo del barrio El Mondongo.
Nacido el 12 de julio de 1923, criado en el barrio el Mondongo de La Plata, que debe su nombre al origen de su población: la leyenda dice que los trabajadores de los frigoríficos de la zona cobraban parte de su sueldo con distintos cortes de carne, entre ellos uno llamado mondongo, su padre era ebanista, su madre modista, hizo la educación primaria en la humilde Escuela 45 y la secundaria en el prestigioso Colegio Nacional de La Plata. Presagio del destino, vivía a sólo una cuadra del Hospital Policlínico. Ya desde los cuatro años decía que su sueño era ser doctor, doctor como su tío.
Cita de este ilustrador artículo en Infobae.

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Estrenando el título estuvo en el Hospital Gral San Martín, ese mismo que sale en la imagen de arriba. Tiene una página web en https://hospitalsanmartin.ar/
Casualmente, en 1949, apenas recibido, se produjo una vacante para médico auxiliar. Accedió al puesto en carácter interino y a los pocos meses lo llamaron para confirmarlo. Le pidieron que completara una tarjeta con sus datos; pero en el último renglón debía afirmar que aceptaba la doctrina del gobierno peronista. Sus calificaciones eran mérito más que suficiente para obtener el puesto, por lo que ese requisito resultaba humillante para alguien que, como él, había formado parte de movimientos por mantener en Argentina una línea democrática, de libertad y justicia, razón por la cual incluso había tenido que soportar la cárcel en alguna oportunidad. Poner la firma en esa tarjeta significaba traicionar todos sus principios. Contestó que lo pensaría, pero en realidad sabía con claridad cuál iba a ser la respuesta
Fuente.


Tenía un tío en Jacinto Arauz, a 200 km al sur de la capital de la provincia de La Pampa, que le pidió reemplazara al galeno del pueblo por 3 meses. Se quedó 12 años. Más sobre su vida ahí en esta nota de lanacion.com.ar.

En 1962 fue a EE.UU. a perfeccionarse como cirujano, vivió en Cleveland, y desarrolló un avance muy importante.
La estandarización de esta técnica, llamada del baipás (del inglés bypass: derivación) o cirugía de revascularización miocárdica, fue el principal trabajo de su carrera, lo que le dio prestigio internacional, ya que el procedimiento cambió radicalmente la historia de la enfermedad coronaria.
Se estima que este procedimiento salvó la vida de unos 55 millones de personas. Fuente.

En el 71 volvió.
Favaloro regresó a la Argentina, con la idea de desarrollar un centro de excelencia similar al de la Cleveland Clinic, que combinara la atención médica, la investigación y la educación, tal como lo dijo en su carta de renuncia.
En 1975 fundó con ese propósito junto a otros colaboradores la Fundación Favaloro,10​ no sólo una clínica sino un centro de capacitación donde estudian alumnos de diferentes partes del mundo y donde cada dos años se celebra el congreso Cardiología para el Consultante. En el año 1980 creó el Laboratorio de Investigación Básica, manteniéndolo con dinero propio por un largo tiempo, dependiente del Departamento de Investigación y Docencia de la Fundación Favaloro. Con posterioridad, pasó a ser el Instituto de Investigación en Ciencias Básicas del Instituto Universitario de Ciencias Biomédicas. Esta fue la base de la creación, en agosto de 1998, de la Universidad Favaloro.
En el año 1992 se inauguró en Buenos Aires el Instituto de Cardiología y Cirugía Cardiovascular de la Fundación Favaloro, entidad sin fines de lucro. Con el lema: «tecnología de avanzada al servicio del humanismo médico», se brindan servicios altamente especializados en cardiología, cirugía cardiovascular y trasplante cardíaco, pulmonar, cardiopulmonar, hepático, renal y de médula ósea, además de otras áreas. Favaloro concentró allí su tarea, rodeado de un grupo selecto de profesionales dejando al Sanatorio Güemes.
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Suicidio

Hacia el año 2000, Argentina estaba sumergida en una crisis económica y política. La Fundación Favaloro se encontraba en una difícil situación, como acreedor de grandes deudas del PAMI y otras obras sociales,17​ y endeudada en unos 18 millones de dólares estadounidenses,18​ por lo que Favaloro pidió ayuda al Gobierno argentino, sin recibir una respuesta oficial.19​

Estoy pasando uno de los momentos más difíciles de mi vida, la fundación tiene graves problemas financieros. En este último tiempo me he transformado en un mendigo. Mi tarea es llamar, llamar y golpear puertas para recaudar algún dinero que nos permita seguir.
René Favaloro.20​21​

El 29 de julio del año 2000 ―el mismo día del cumpleaños de su amigo y cardiólogo Luis de la Fuente, quien lo había convencido para volver a la Argentina―, Favaloro se encerró en el baño de su casa y se disparó un tiro en el corazón.
En una de sus 7 cartas antes del suicidio dijo:
"Quizá el pecado capital que he cometido aquí en mi país, fue expresar siempre en voz alta mis sentimientos, mis críticas, insisto, en esta sociedad del privilegio, donde unos pocos gozan hasta el hartazgo, mientras la mayoría vive en la miseria y la desesperación. Todo esto no se perdona, por el contrario, se castiga. Me ha derrotado esta sociedad corrupta que todo lo controla"

Las citas previas son de su página en la W.

Otro gran artículo en infobae firmado por Milton del Moral, recuerda al "médico rural".

De ahí tomo su párrafo final:
Hoy, el pueblo abraza a Favaloro en el día de su centenario. Es una devolución de favores. En 1989, Favaloro visitó el pueblo en el marco del centenario. Se abrazó emocionado con ex pacientes y se negó a entrar a la clínica porque no quería que su amor lo traicionara. Vivió once años más después de ese día. Ya estaba cansado de luchar “galopando contra el viento como decía Don Ata”, según escribió en su carta de adiós, aquella misiva final que cerró con un pedido irrevocable: “Una vez más reitero la obligación de cremarme inmediatamente sin perder tiempo y tirar mis cenizas en los montes cercanos a Jacinto Arauz, allá en La Pampa”.

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Para mí
Favaloro en su grandeza y triste final, muestra la realidad argentina, es un ejemplo de lo que le pasa a un tipo honesto que no transa con la corrupción y busca el bien común, la salud y educación para todos sin distinción de clases sociales.
Pierde ante las mafias organizadas para mantener una sociedad decadente, cada día más ignorante y bruta, controlada por una clase rica llena de coimeros, y una clase política garca y farsante de TODOS LOS PARTIDOS POLÍTICOS que desprecia y engaña a los ciudadanos desde hace 40 años mientras saquea el país.
Pasaron más de dos décadas desde su suicido, los honestos siguen sin tener espacio ni influencia en Argentilombo.

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