Este filme fue estrenado en el 2018, tuvo un presupuesto de 17 millones de dólares y recaudó más de 300.
Lo protagonizaron Emily Blunt y John Krasinski, que son pareja en la vida real.
A mí me pareció más de suspenso que de terror.
Es de esos ubicados luego de un apocalipsis con los protagonistas siendo de los últimos sobrevivientes de una humanidad casi extinta.
Tiene muchas cosas muy peculiares.
Los protagonistas son los dos padres y sus hijos pequeños, ninguno llega a los 17 años.
Sobreviven en silencio para evitar morir. Esto es muy chocante pues pasan muchos minutos sin hablar y a mí como espectador me hizo ver lo antinatural de eso como forma de subsistencia.
Me pareció distintivo que la amenaza sea el sonido y que la vida dependa de poder mantenerse sin hacer ruidos.
O que alguien sea sordo en un mundo donde hacer ruido equivale a morir .
También aprecié la forma de ir presentando a los cazadores para ir creando expectativa e intriga.
El estilo del relato es muy rústico, uno se entera de a poco de lo que va pasando y cómo se llegó a esa situación de civilización arrasada casi sin explicaciones formales, con un mundo que parece abandonado y sin ninguna calamidad visible. Y nunca se explica todo completamente.
Por la fecha que se ve en una tumba, el año donde pasa el final de la historia debería ser 2021 aproximadamente.
Hay mucho suspenso y es bastante constante, la escena con la mujer que se refugia en la bañera es un hallazgo.
La mejor interpretación fue para mí de la mujer británica que hace de madre, siendo muy atractiva en la vida real acá no tiene problema en figurar muy afeada por su desesperación y miedo.
Mientras observaba veía que el director no me agredía al estilo de la serie The Office, allí fue donde Krasinski donde se hizo conocido interpretando a Jim Halpert, y que además desplazaba la imagen sin brusquedades, y no obstante lograba hacer que uno tuviera miedo de algo como un clavo en el piso.
Me sorprendió ver era el propio actor y protagonista el director, que también fue coguionista.
Una cosa que me llamó la atención, en los títulos hay tres veces más dobles de riesgo que actores.
Para mí no todo es perfecto.
El que llega al final es demasiado silencioso para ser real.
Lo que pasa en la bañera está muy simplificado.
Su hora y media de duración tiene mucho suspenso que casi no decae y por eso atrapa.
Creo que merece 8 yenes.
P.D. cuando aparecen las amenazas las luces titilan.
Hay una segunda parte que ya agendé para mirar.
