The Irishman, o en español El irlandés, crítica
Esta es una historia de la mafia italiana en EE.UU. y basada en personas reales.
Y en la primera media hora muestra como Frank Sheeran, el protagonista representado por Robert De Niro, entra a formar parte de la organización para el crimen, estimo que todo transcurre inicialmente en los años 60 y cubre varias décadas.
Los italianos eran un poder paralelo y con jerarquías, los capos eran temidos, hasta tenían una realeza de familias tradicionales en el robo y la corrupción, si había que salpicarse de sangre no tenían mucho problema, tenían sus soldados.
En los primeros 45 minutos vemos ascender a Frank en la mafia, luego de eso aparece el capo máximo, que casualmente es el único sindicalista conocido a nivel mundial en la historia de EE.UU, Jimmy Hoffa. Acá lo interpreta Al Pacino, no sé si será real su representación o no, pero el Hoffa que muestra el filme se ve caricaturesco.
La ambientación me pareció de primera. Y eso que hay varios saltos temporales, el protagonista aparece como luciendo de más de ochenta años, rondando los sesenta y los cuarenta.
Las caras rejuvenecidas digitalmente de De Niro, Pesci y Pacino lucen muy creíbles, solo si uno sabe que no fueron filmadas sino creadas por computadora, podría verles “algo imperceptiblemente raro” pero yo al menos no pude identificar ese infinitésimo que les falta para el realismo completo.
Este filme me confirma mi creencia que pronto habrá actores indistinguibles de los humanos pero que serán creaciones digitales.
Lo bueno de esta película es que no hay modelos publicitarios, la gente tiene cara de gente, los mafiosos son gordos pelados, con papadas, todos los actores secundarios, incluso algunos roles más importantes como los de sus mujeres que nunca son bombas sensuales, me parecieron adecuados, creíbles.
En particular me gustó Ray Romano, es un intérprete de comedia familiar que se hizo conocido por una serie llamada “Everybody loves Raymond”, es una prueba más de mi teoría que los buenos humoristas hacen drama de taquito.
Hay nombres en papeles secundarios que también son conocidos, Harvey Keitel, Ana Paquin, o Bobby Cannavale.
Luego de Hoffa, empiezan a mencionarse apellidos como los de los Kennedy, John el presidente, y su hermano Robert.
Pasada una hora y 10 minutos de película vi que no había una trama argumental definida, parecía más como la biografía de Frank Sheeran, de su ascenso en la organización criminal italiana, en el mundo de la mafia sindical de los camioneros, y una descripción de cómo manejaban su poder, con sobres o asesinatos. Restaban todavía 2 horas y 20 minutos más para comprobar que tenía razón.
Es una historia de una persona, de un asesino de la mafia.
Y como es una descripción realista, no se la pasa matando gente todo el tiempo, el filme se centra mucho en la cultura mafiosa, los capos, las familias de cada jefe, las relaciones personales.
Cuando Hoffa ocupa el centro de la escena, la película pasa a ser más bien un muestrario de cómo se dirimen los asuntos entre los líderes mafiosos.
También es un tema de lealtades y códigos entre los capos, y fidelidades personales, para mi gusto Scorsese los hace ver demasiado humanos a los amos y señores de la corrupción y el asesinato.
Hay una escena de un ataque físico a un verdulero que me pareció muy mal hecha irreal para una producción con el presupuesto y talento que tiene esta película detrás. Las patadas lucen totalmente irreales, a medio metro de la cabeza de quien supuestamente es golpeado. No sé como la dejaron. Pero eso fue la excepción en lo que yo percibí.
El que desee ver una película de acción va errado con El Irlandés pues básicamente cuenta la vida de Frank Sheeran, y su ascenso entre las “familias”. En particular su vínculo con su “padrino” Russell Bufalino, uno de los capos que pesa sin amenazar, creo que es una gran actuación de Joe Pesci.
Sus 3 horas 29 minutos se me hicieron demasiado largas.
Los avances que vi me dieron idea de un filme con mucha más acción, tal vez por eso me decepcionó un poco.
La escenografía, iluminación la ambientación de época, ropa, peinados, edificios, mobiliarios, me parecieron muy bien hechas.
Los autos son un placer de ver, tal vez irrealmente limpios y brillantes, con gran variedad.
El final no es algo típico del rubro ya que nos muestra al asesino anciano.
Scorsese como director me agrada, no marea a nadie con sus imágenes, pero esta no me pareció de sus mejores películas, sufrí un poco que no haya más acción y sea muy larga.
Creo que merece
6,5 yenes.
P.D. El filme se basa en el libro de un tal Charles Brandt que se titula "Escuché que pintás casas", "
I heard you paint houses", la pintura es solo de rojo.
Brandt es un abogado que escribió lo que le contó
Frank Sheeran, pero solo refleja los dichos de él, de ahí a que sea todo cierto es otra cosa.